jueves, 11 de junio de 2009

El primer mandamiento da sentido a todos los demás

Cuando Dios pone como fundamento de toda la Ley

el primer mandamiento, es que hay que empezar por él.

En este mandamiento está resumida

toda la Ley y todos los profetas.

Cuando uno sigue ese orden de prioridad que Dios establece,

se da cuenta que todos los otros mandamientos

están condicionados por éste.

En él se nos descubre Dios como el verdadero Dios,

como la fuente del verdadero amor.

En él descubrimos a quién llama Dios nuestro prójimo,

descubrimos el amor que Dios le tiene,

que es una medida del amor que nos pide que le tengamos.

Si prescindimos del primer mandamiento

salimos del terreno de Dios para entrar en nuestro terreno.

Definimos el amor, definimos al prójimo,

definimos el amor que le damos,

cuándo hemos de dárselo

y cuándo estamos autorizados a negárselo.

Hemos cortado toda conexión con Dios,

el amor que hacemos circular es ya una moneda nuestra,

nuevos Césares, a los que es preciso pagar un tributo

como recompensa a todo lo que nos da.

Ese amor nos separa más de lo que nos une,

nos destruye más de lo que nos construye

miércoles, 10 de junio de 2009

La Ley del amor... Amar como amó Jesús.

¿Dónde había quedado la Ley?

¿De quién era aquella ley que pensaban

que Jesucristo no cumplía, que anulaba?

¿Alguien amó más que Jesús a Dios y al hombre?

¿Alguien más que Jesús

tenía en sus labios el nombre de Dios

y su amor en el corazón?

¿Alguien más que Jesús había hecho ilusión de su vida

el cumplimiento de la voluntad de Dios?

La Ley se dio a Moisés

en unas Tablas de piedra,

y a se nos dio a todos escrita

con trazos de amor en la persona de Jesús.

El amor no tiene sino una fuente, Dios.

Y el hombre no entendió, hasta Jesús,

que el amor con que se nos pedía amar

era el amor que manaba del corazón de Dios.

Ama, lo primero, a Dios con todo tu corazón,

para que el amor con que amas

sea el amor con que ama Dios.

Dios se ama... Dios ama al hombre

con un amor que sólo Jesús

que bebió siempre de aquella única fuente,

llegó a entender... el amor hecho perdón,

el amor hecho entrega hasta la muerte.

Demasiado frías aquellas Tablas

para contener el fuego del amor de Dios.

Cumplir la Ley tiene ya una nueva expresión...

Amaos como os he amado yo...

martes, 9 de junio de 2009

Un mundo de MUJERES Y HOMBRES...

Dios no nos llama para que hablemos de Dios,

sino para que seamos suyos.

No nos llama para hablar de otros hombres,

sino para que seamos otros hombres.

Nuestra vida cambia cuando nos dejamos alcanzar por Él.

Y ese hombre nuevo es ya como la Zarza del Sinaí:

arde, luce para siempre sin consumirse

porque lo que en él brilla es la luz de Dios.

Como los apóstoles, damos testimonio

de lo que hemos visto y oído.

El camino es el que Cristo recorre,

es el que Cristo te hace recorrer.

Tu luz es como la que brilla junto al Sagrario…

Dios está aquí… vengo de Dios,

mi camino lleva a Dios cuando voy por el camino

que Dios me ha pedido recorrer.

Mi camino pasa por entre mucha gente

que nunca hubieran pensado

que tuvieran tan cerca el camino de Dios;

que vivían desde siempre al borde de ese camino.

Tú has sido enviado para que ese camino aparezca,

para que tu luz lo ilumine,

para que todos vean, cuando lo recorres,

que ese camino es de Dios, que lleva a Dios,

que nos lleva a ser hombres, mujeres…

un camino capaz de unir todos los caminos.

domingo, 7 de junio de 2009

Familia de Dios... La que es; la que somos.

Dios no pierde el tiempo explicándonos sus misterios;

nos permite sencillamente asomarnos a su vida.

Puedo no entender cómo es posible que exista…

Dios existe… punto.

Puedo no entender como puede ser Uno y Trino

Dios lo es … punto.

Pero tenemos clara una cosa…

Dios es perfecto en todo lo que es.

No sé si es la perfección de cada uno

la que les lleva a la Unidad

o si es en la Unidad donde cada uno realiza su perfección.

Dios es las dos cosas; perfecto en sus Personas

y perfecto en su Unidad.

Y… punto.

Debe ser algo importante, muy importante,

cuando se hace oración en labios de Jesús:

¡Que sean uno como Tú y Yo, Padre, somos Uno!.

El domingo pasado celebrábamos la Fiesta de Pentecostés,

la llegada del Espíritu Santo a nuestra ”tierra”

y ya lo veis: su primer acto es mostrarnos la familia

que Padre, Hijo y Espíritu son.

¿Una casualidad?. Pues no; es el principio

de una tierra nueva, unos hombres y mujeres nuevos,

una nueva creación.

Mientras vivamos tan separados como lo hacemos,

seremos miles de millones de gente pequeñita…

Sólo cuando permitamos que el Espíritu

haga de nosotros una unidad,

el hombre será grande:

con la grandeza que Dios le ha dado

y con la grandeza que supone el que cada uno de los hombres

pueda contar con las “riquezas” de todos.

Y por lo que parece, no sólo seremos más grandes…

seremos, sencillamente, MUJERES Y HOMBRES nuevos.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Yo soy el que soy... ¿Sois vosotros los que sois?

¡Que se mantengan unidos, Padre...!
¡Que sepan mantenerse en su sitio,
en el lugar de su cruz, con los brazos abiertos!
Que vivan su vida en medio del mundo,
porque es allí donde está en juego la vida.
Y es allí donde hay que apostar por la vida.
Yo tuve que venir... mi mundo era otro.
Ellos han nacido aquí...
y aquí tienen que vivir; es su mundo.
Corren el riesgo de hacer lo de todos
aunque sea desde "otro bando":
huir de quien les persigue,
rechazar a quienes les rechazan.
Dios no puede ser la razón,
ni siquiera la excusa
para mantenernos divididos, enfrentados.
Los míos han de ser el mejor testimonio
de que yo soy diferente...
¡que no soy el que piensan!
¡que no soy el causante de sus males!
¡que no soy su perseguidor
ni el que les abandona!
¡Guárdalos, Padre, pero no los saques del mundo!
Tú sabes que los hombres les necesitan,
y sabes que nosotros también.
Que sean uno con nosotros,
que vean en ellos quién es Dios,
quiénes somos nosotros, Tú, el Espíritu, Yo...
¡Que descubran quiénes pueden ser ellos,
y cómo cambiaría el mundo
si se deciden a cambiar... a dejarse cambiar!

martes, 26 de mayo de 2009

Dios no pudo hacernos dioses... Sólo ¡darse a conocer!

Dios es inmensamente feliz. ¿Alguien lo duda?
Y sabe que es la fuente de la vida y de la felicidad.
No es celoso de su vida ni de su felicidad.
Y pensó en el hombre
para que pudiera participar de las dos.
No pudo hacerle partícipe de su persona,
porque sabe que nadie puede ser Dios
fuera de Dios.
Pero sí podía dársele a conocer
para que viéndole
pudiera ser tan feliz como como lo es Él conociéndose..
Dios es feliz cuando el hombre le conoce,
porque, al conocerle, no puede por menos de amarle,
desear ser como él en su persona,
y en la medida en que el hombre ama la vida de Dios
va participando de su vida y de su felicidad.
Es lo que Dios espera del hombre
y con ello le da más gloria:
que el hombre ansíe como opción personal
ser todo lo que es ya por don, por gracia.
Jesús se lo dice al Padre:
lo feliz que ha sido desde el principio al conocerle,
lo feliz que le ha hecho el poder darle a conocer.
Y es lo que pide para todos los suyos:
que reciban la gracia de conocerles
y otra, que casi es igual: ¡darles a conocer!

lunes, 25 de mayo de 2009

Dios contó con María... Ella vio cómo Dios cuenta con todos


María Auxiliadora es...
María: Enamorada de ser la que es,
y enamorada del plan de Dios
que abarca a cada hombre
y que quiere contar con cada uno
como contó con ella.
Sabe que nadie ha sido hecho prescindible,
y que uno de los momentos más bonitos de la vida
es aquel en que uno descubre
que Dios ha pensado en él.
Y sabe que en la vida de cada uno
hay un momento en que llega un Ángel...
que no hay que abrirle la puerta de casa,
ante él se abren solas,
pero sí hay que abrirle el corazón,
porque es el momento de hacer ese descubrimiento:
¡Dios ha pensado en mí, cuenta conmigo!
La vida vuelve a comenzar...
Auxiliadora: Ella sabe que comenzar
nos obliga a olvidar muchas cosas,
a aprender y aceptar muchas más.
Y eso no es que sea nada fácil.
Pero uno sabe ya quién es,
y sabe lo es para Dios.
Nada hay pequeño en uno cuando ha descubierto
el valor que Dios da a toda su persona.
María Auxiliadora ayuda a encontrarse con Dios,
ayuda a encontrarse con uno mismo,
y ayuda caminar incansables
hacia Dios y hacia sí mismos.
Y no sabes cómo le encanta
que le ayudes a hacer con muchos más
lo que ella ha hecho ya contigo.

Es el amor de mi alma desde que yo supe amar...

Siempre es peligroso inventarse cosas,
pero es igualmente peligroso el reducir.
La Asunción indudablemente es un regalo
que expresa el cariño de Dios por la Virgen,
en todo igual y en todo diferente de los hombres.
Pero no puedo por menos de pensar que, al mismo tiempo,
es la única manera de que pudiera ser
verdaderamente nuestra madre.
Seguro que Dios la quería cerca,
como Hija, como Esposa, como Madre...
Pero vio que el hombre difícilmente
podría aceptar que Dios nos diera una madre "muerta"
que debía aguardar como todos al último día
para volver a ser plenamente ella.
Dios la resucitó y la llevó a los cielos
para que estuviera con él,
pero también para que pudiera estar con nosotros.
Tenía que ver a Dios como a nadie le es dado ver
para que pudiera estar del todo a nuestro lado...
¿Recordáis lo que dice Jesús cuando habla de los niños...
"Sus ángeles ven cada día el rostro de Dios"?
Hay que ver cada día el rostro de Dios
para que no se apague nunca en el corazón de nadie
el amor al hombre.
Es el amor que se ve reflejado en el rostro de Dios,
y que mantiene vivo en todos el amor,
también el amor por el hombre.
María, por voluntad de Jesús...
por voluntad de Dios Padre, Hijo y Espíritu
es para siempre Madre...
del Hijo de Dios, de cada hijo de Dios,
es mi Madre, es tu Madre, nuestra Madre.